27. No son sólo nuestros intereses los que salen perjudicados, sino que también el templo de la gran diosa Artemisa corre peligro de ser desprestigiado. Al final se acabará la fama de aquella a quien adora toda el Asia y el mundo entero.»





“Que Jesus o mergulhe no esplendor da Sua imortal juventude.” São Padre Pio de Pietrelcina