Encontrados 56 resultados para: Enfermo

  • Algún tiempo después, avisaron a José de que su padre estaba enfermo. Tomó entonces con él a sus dos hijos, Manasés y Efraím, (Génesis 48, 1)

  • Cuando Saúl mandó gente para que apresaran a David, ella dijo: «Está enfermo.» (1 Samuel 19, 14)

  • Amnón se acostó y fingió estar enfermo. Vino el rey a visitarlo, y Amnón le dijo: «Permite que venga mi hermana Tamar y prepare delante de mí un par de tortas; yo las tomaré de su mano.» (2 Samuel 13, 6)

  • Por aquel tiempo cayó enfermo el hijo de Jeroboam, que se llamaba Abías. (1 Reyes 14, 1)

  • Pero Yavé le había dicho: «La esposa de Jeroboam viene a ti, haciéndose pasar por otra, para consultar acerca de su hijo enfermo. Cuando ella entre, le dirás esto.» (1 Reyes 14, 5)

  • Lo demás referente a Asá, su valentía y las ciudades que conquistó, todo lo que hizo está escrito en el libro de los Hechos de los reyes de Judá. Un dato más: en su ancianidad enfermó de los pies. (1 Reyes 15, 23)

  • Después de estos hechos, el hijo de la dueña de la casa enfermó y su enfermedad fue tan grave que murió. (1 Reyes 17, 17)

  • Naamán era el jefe del ejército del rey de Aram. Este hombre era muy estimado. Gozaba del favor del rey porque Yavé se había valido de él para conducir a la victoria el ejército de los arameos. Pero este valiente estaba enfermo de lepra. (2 Reyes 5, 1)

  • Eliseo se fue a Damasco. Ben-Hadad, rey de Aram, estaba enfermo y le dieron este aviso: «El hombre de Dios ha venido hasta aquí.» (2 Reyes 8, 7)

  • Jehú subió a su carro y tomó el camino de Jezrael, donde estaba Joram enfermo, a quien Ocozías, rey de Judá, había ido a visitar. (2 Reyes 9, 16)

  • Cuando Eliseo enfermó del mal que lo llevó a la muerte, bajo donde él Joás, rey de Israel, y lloró sobre su rostro, diciendo: «¡Padre mío, padre mío, carro y caballos de Israel!» (2 Reyes 13, 14)

  • El rey fue víctima de una plaga de Yavé, pues enfermó de lepra, y quedó leproso hasta el día de su muerte. Vivió en una casa aislada, mientras Jotam, su hijo, estaba al frente de la casa del rey y administraba justicia al reino. (2 Reyes 15, 5)


“Feliz a alma que atinge o nível de perfeição que Deus deseja!” São Padre Pio de Pietrelcina