Encontrados 20 resultados para: Miré
¡Yavé haga resplandecer su rostro sobre ti y te mire con buenos ojos! (Números 6, 25)
Miré de cerca todo lo que se hace bajo el sol: ¡no se tiene nada, se corre tras el viento! (Eclesiastés (Qohelet) 1, 14)
Miré y no había nadie que diera una opinión, a quien yo preguntara y que me respondiera. (Isaías 41, 28)
Miré a mi alrededor y me asombré: no había quien me ayudara. Así es que no conté más que con mi brazo y mi enojo me dio fuerzas. (Isaías 63, 5)
Miré a la tierra, pero estaba vacía y llena de confusión. Miré a los cielos, y eran sólo tinieblas. (Jeremías 4, 23)
Miré a los montes, y temblaban; a los cerros, y se sacudían. (Jeremías 4, 24)
Miré y me di cuenta que no había un alma, y que todos los pájaros del cielo se habían ido. (Jeremías 4, 25)
Miré los campos floridos, pero estaban secos, y todas las ciudades habían sido destruidas por Yavé y por el ardor de su cólera. (Jeremías 4, 26)
hasta que Yavé desde los cielos mire y vea. (Lamentaciones 3, 50)
Yo miré: un viento huracanado venía del norte. Vi una gran nube: En medio de ella un fuego ardiente irradiaba luz, y el centro era como de metal incandescente. (Ezequiel 1, 4)
Miré: hacia mí se tendió una mano que sostenía el rollo del libro. (Ezequiel 2, 9)
Miré, era una forma humana; por debajo de la cintura no era más que fuego, y de la cintura para arriba era como un metal incandescente. (Ezequiel 8, 2)