Encontrados 37 resultados para: bestias

  • Entonces Yavé Dios dijo a la serpiente: «Por haber hecho esto, maldita seas entre todas las bestias y entre todos los animales del campo. Te arrastrarás sobre tu vientre y comerás tierra por todos los días de tu vida. (Génesis 3, 14)

  • Todo ser mortal que se mueve sobre la tierra pereció: aves, bestias, animales, todo lo que tiene vida y se mueve sobre la tierra - y toda la humanidad. (Génesis 7, 21)

  • Saca también contigo a todos los seres vivientes que tienes dentro de todas las especies: aves, animales, bestias y reptiles que se arrastran por el suelo. Que pululen, llenen la tierra y se multipliquen.» (Génesis 8, 17)

  • y también con todos los seres vivientes que están con ustedes: aves, animales domésticos, y fieras salvajes, en una palabra, con todas las bestias de la tierra que han salido del arca. (Génesis 9, 10)

  • Guarden mis tradiciones. No aparearás en tu ganado dos bestias de diferente especie; no sembrarás tu campo con dos clases distintas de grano; no usarás ropa tejida con hilos de dos clases. (Levítico 19, 19)

  • También tus animales comerán lo que produce naturalmente la tierra, igual que las bestias del campo. (Levítico 25, 7)

  • Habiendo reunido todo el botín y los despojos, hombres y bestias, (Números 31, 11)

  • Tu cadáver servirá de comida a todas las aves del cielo y a todas las bestias de la tierra, sin que nadie las corra. (Deuteronomio 28, 26)

  • al lado oriental del Jordán. Por otra parte los levitas no recibieron herencia, pero en lugar de ellos, los hijos de José formaban dos tribus: Manasés y Efraím. Los levitas no tuvieron tierras sino algunas ciudades para vivir y el campo alrededor para mantener a sus bestias y ganados. (Josué 14, 4)

  • Pero Joás, rey de Israel, mandó decir a Amasías, rey de Judá: «El cardo del Líbano mandó a decir al cedro el Líbano: Dame tu hija para mujer de mi hijo. Pero las bestias salvajes del Líbano pasaron y pisotearon el cardo. (2 Crónicas 25, 18)

  • ¡Viva Nabucodonosor, rey de toda la tierra, y viva su poder que te ha enviado para poner en el recto camino a todo viviente! Gracias a tu poder, no sólo los hombres le sirven, sino que hasta las bestias salvajes, los ganados y las aves del cielo viven para Nabucodonosor y toda su casa. (Judit 11, 7)

  • No más piedras en tus campos: la tierra te servirá, y las bestias salvajes no te atacarán. (Job 5, 23)


“Jesus está com você, e o Cireneu não deixa de ajudar-te a subir o Calvário.” São Padre Pio de Pietrelcina