Encontrados 21 resultados para: plantas

  • Dijo Dios: «Produzca la tierra hortalizas, plantas que den semilla, y árboles frutales que por toda la tierra den fruto con su semilla dentro, cada uno según su especie.» Y así fue. (Génesis 1, 11)

  • La tierra produjo hortalizas, plantas que dan semillas y árboles frutales que dan fruto con su semilla dentro, cada uno según su especie. Dios vio que esto era bueno. (Génesis 1, 12)

  • Dijo Dios: «Hoy les entrego para que se alimenten toda clase de plantas con semillas que hay sobre la tierra, y toda clase de árboles frutales. (Génesis 1, 29)

  • Ustedes tendrán por impuros a todos los cuadrúpedos que andan sobre las plantas de sus patas. (Levítico 11, 27)

  • Ojalá no haya, pues, entre ustedes hombre o mujer, familia o tribu, cuyo corazón se aparte hoy de Yavé para ir a servir a los dioses de esas naciones. Ojalá no broten entre ustedes plantas venenosas y amargas. (Deuteronomio 29, 17)

  • Habló de las plantas, desde el cedro del Líbano hasta el hisopo que brota en los muros; disertó sobre cuadrúpedos, aves, reptiles y peces. (1 Reyes 4, 33)

  • haces brotar el pasto para el ganado y las plantas que el hombre ha de cultivar, para que de la tierra saque el pan (Salmos 104, 14)

  • Aquí están nuestros hijos como plantas que van creciendo desde su niñez, nuestras hijas son columnas angulares esculpidas en el frontis de un palacio. (Salmos 144, 12)

  • Porque él cubre de nubes los cielos, y prepara las lluvias de la tierra, hace brotar la hierba en las colinas y las plantas que el hombre ha de cultivar; (Salmos 147, 8)

  • sus mejillas, plantaciones de balsameras, cultivo de plantas olorosas. Sus labios son lirios que destilan mirra pura. (Cantar 5, 13)

  • las diferentes especies y el comportamiento de las fieras salvajes, el poder de los espíritus y los problemas de los hombres, la variedad de las plantas y las propiedades de sus raíces. (Sabiduría 7, 20)

  • Sus hijos serán plantas sin raíces, sus ramas no producirán frutos. (Sirácides (Eclesiástico) 23, 25)


“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina