Encontrados 45 resultados para: sepultaron

  • Cuando Joás se acostó con sus padres, lo sepultaron en Samaria junto a sus padres, y su hijo Jeroboam reinó en su lugar. (2 Reyes 14, 16)

  • Su cuerpo fue traído de allí en un carro, y lo sepultaron en Jerusalén con sus padres, en la ciudad de David. (2 Reyes 14, 20)

  • Cuando murió Azarías, lo sepultaron con sus padres en la ciudad de David, y su hijo Jotam le sucedió. (2 Reyes 15, 7)

  • Cuando murió Jotam, lo sepultaron con sus padres en la ciudad de su antepasado David y su hijo Ajaz le sucedió. (2 Reyes 15, 38)

  • Cuando murió Ajaz, lo sepultaron con sus padres en la ciudad de David, y su hijo Ezequías le sucedió. (2 Reyes 16, 20)

  • Cuando murió Manasés, lo sepultaron en el jardín de su casa, en el jardín de Uzza, y su hijo Amón reinó en su lugar. (2 Reyes 21, 18)

  • Lo sepultaron en su sepulcro, en el jardín de Uzza, y reinó en su lugar su hijo Josías. (2 Reyes 21, 26)

  • Sus servidores trasladaron en carro su cadáver desde Meguido hasta Jerusalén y lo sepultaron en su sepulcro. Entonces el pueblo tomó a Joacaz, hijo de Josías, para ungirlo y hacerlo rey en lugar de su padre. (2 Reyes 23, 30)

  • Se acostó Abías con sus padres y lo sepultaron en la ciudad de David. Reinó en su lugar su hijo Asá. En su tiempo el país estuvo en paz durante diez años. (2 Crónicas 13, 23)

  • y lo sepultaron en el sepulcro que se había hecho en la ciudad de David. Lo pusieron sobre un lecho que habían llenado de aromas preparados según el arte de perfumería y, por él, se quemaron perfumes en enorme cantidad. (2 Crónicas 16, 14)

  • Cuando Josafat murió lo sepultaron con sus padres en la ciudad de David y su hijo Joram lo sucedió. (2 Crónicas 21, 1)

  • Tenía treinta y dos años cuando empezó a reinar y reinó en Jerusalén ocho años. Se fue sin que nadie lo llorara; y lo sepultaron en la ciudad de David, pero no en los sepulcros de los reyes. (2 Crónicas 21, 20)


“Não se aflija a ponto de perder a paz interior. Reze com perseverança, com confiança, com calma e serenidade.” São Padre Pio de Pietrelcina