Encontrados 1053 resultados para: vio

  • A los hijos de las concubinas que tenía Abrahán, en cambio, les hizo regalos, y estando él vivo todavía, los envió más al este, a los paises del oriente, lejos de Isaac. (Génesis 25, 6)

  • Abrahán vivió ciento setenta y cinco años. (Génesis 25, 7)

  • Ismael vivió ciento treinta y siete años. Luego murió y fue a juntarse con sus antepasados. (Génesis 25, 17)

  • Isaac volvió a abrir los pozos que habían sido cavados en tiempos de su padre Abrahán, y que habían tapado los filisteos después de la muerte de Abrahán, y les puso los mismos nombres que les había puesto su padre. (Génesis 26, 18)

  • Volvió a preguntarle: «¿Eres de verdad mi hijo Esaú? » Contestó Jacob: «Sí, yo soy». (Génesis 27, 24)

  • Isaac continuó: «Acércame la caza que me has preparado, hijo mío, para que la coma y te dé mi bendición.» Jacob le sirvió y comió. También le ofreció vino, y bebió. (Génesis 27, 25)

  • Isaac comenzó a temblar violentamente y dijo: «Pues entonces, ¿quién es el que cazó y me sirvió su caza? Yo comí de todo antes de que tú llegaras y le di mi bendición: ¡sí, él tiene la bendición!» (Génesis 27, 33)

  • Esaú vio que su padre había bendecido a Jacob y lo enviaba a Padán-Aram para que allí se buscara una mujer. Escuchó también que, después de haberlo bendecido, le había ordenado: «No te cases con ninguna mujer cananea», (Génesis 28, 6)

  • Mientras dormía, tuvo un sueño. Vio una escalera que estaba apoyada en la tierra, y que tocaba el cielo con la otra punta, y por ella subían y bajaban ángeles de Dios. (Génesis 28, 12)

  • En el camino vio un pozo, y cerca de él descansaban tres rebaños de ovejas, pues era en este pozo donde tomaban agua los rebaños. Una gran piedra cubría la boca del pozo. (Génesis 29, 2)

  • Apenas Jacob vio a Raquel, hija de Labán, hermano de su madre, se acercó al pozo, movió la piedra de la boca del pozo y dio agua a las ovejas de Labán. (Génesis 29, 10)

  • Volvió a quedar esperando y tuvo otro hijo; y esta vez dijo: «Ahora sí que me querrá mi marido, pues le he dado ya tres hijos.» Por eso lo llamó Leví. (Génesis 29, 34)


“Cuide de estar sempre em estado de graça.” São Padre Pio de Pietrelcina