Encontrados 14 resultados para: Corriente

  • Abraham aceptó la propuesta de Efrón, y teniendo por testigos a los descendientes de Het, pesó la cantidad que aquel le había fijado: cuatrocientos siclos de plata, según la tasación corriente entre los comerciantes. (Génesis 23, 16)

  • Joás dijo a los sacerdotes: "Todo el dinero que se aporte a la Casa del Señor como ofrenda consagrada -el dinero en moneda corriente, los aranceles personales según los recursos de cada uno, y todo el dinero que aporte cada uno a la Casa del Señor por propia voluntad- (II Reyes 12, 5)

  • Estoy hundido en el fango del Abismo y no puedo hacer pie; he caído en las aguas profundas, y me arrastra la corriente. (Salmos 69, 3)

  • que no me arrastre la corriente, que no me trague el Abismo, que el Pozo no se cierre sobre mí. (Salmos 69, 16)

  • Lo presionó para que se lo entregara, a fin de que reinara en lugar de su padre; lo puso al corriente de todo lo que había hecho Demetrio y del odio que le tenían sus tropas, y permaneció allí mucho tiempo. (I Macabeos 11, 40)

  • El corazón del rey es una corriente de agua en manos del Señor: él lo dirige hacia donde quiere. (Proverbios 21, 1)

  • Sus ojos son dos palomas junto a una corriente de agua, que se bañan en leche y se posan sobre un estanque. (Cantar 5, 12)

  • No tengas vergüenza de confesar tus pecados ni pretendas oponerte a la corriente de un río. (Eclesiástico 4, 26)

  • Escúchenme, hijos santos, y crezcan como rosal que brota junto a la corriente de agua. (Eclesiástico 39, 13)

  • Ellos serán como un refugio contra el viento, como un reparo contra la tormenta, como una corriente de agua en suelo árido, como la sombra de un peñasco en tierra reseca. (Isaías 32, 2)

  • Él es como un árbol plantado al borde de las aguas, que extiende sus raíces hacia la corriente; no teme cuando llega el calor y su follaje se mantiene frondoso; no se inquieta en un año de sequía y nunca deja de dar fruto. (Jeremías 17, 8)

  • Tú me arrojaste a lo más profundo, al medio del mar: la corriente me envolvía, ¡todos tus torrentes y tus olas pasaron sobre mí! (Jonás 2, 4)


“O passado não conta mais para o Senhor. O que conta é o presente e estar atento e pronto para reparar o que foi feito.” São Padre Pio de Pietrelcina