Encontrados 229 resultados para: Faraón

  • Cuando también los egipcios y el pueblo sintieron hambre, y el pueblo pidió a gritos al Faraón que le diera de comer, este respondió: "Vayan a ver a José y hagan lo que él les diga". (Génesis 41, 55)

  • Por eso van a ser sometidos a una prueba: juro por el Faraón que ustedes no quedarán en libertad, mientras no venga aquí su hermano menor. (Génesis 42, 15)

  • Judá se acercó para decirle: "Permite, señor, que tu servidor diga una palabra en tu presencia, sin impacientarte conmigo, ya que tú y el Faraón son una misma cosa. (Génesis 44, 18)

  • Sin embargo, sus sollozos eran tan fuertes que los oyeron los egipcios, y la noticia llegó hasta el palacio del Faraón. (Génesis 45, 2)

  • Ha sido Dios, y no ustedes, el que me envió aquí y me constituyó padre del Faraón, señor de todo su palacio y gobernador de Egipto. (Génesis 45, 8)

  • Cuando en el palacio del Faraón se difundió la noticia de que habían llegado los hermanos de José, el Faraón y sus servidores vieron esto con buenos ojos. (Génesis 45, 16)

  • El Faraón dijo a José: "Ordena a tus hermanos que carguen sus animales y vayan en seguida a la tierra de Canaán, (Génesis 45, 17)

  • Así lo hicieron los hijos de Israel. De acuerdo con la orden del Faraón, José les dio unos carros y les entregó provisiones para el camino. (Génesis 45, 21)

  • Cuando Jacob salió de Berseba, los hijos de Israel hicieron subir a su padre, junto con sus hijos y sus mujeres, en los carros que el Faraón había enviado para trasladarlos. (Génesis 46, 5)

  • Después José dijo a sus hermanos y a la familia de su padre: "Yo iré a informar al Faraón y le diré: ‘Mis hermanos y la familia de mi padre, que antes estaban en Canaán, han venido a reunirse conmigo. (Génesis 46, 31)

  • Por eso, cuando el Faraón los llame y les pregunte de qué se ocupan, (Génesis 46, 33)

  • Luego José fue a informar al Faraón, diciendo: "Mi padre y mis hermanos vinieron de Canaán con sus ovejas, sus vacas y todo lo que poseen, y ahora están en la región de Gosen". (Génesis 47, 1)


“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina