Encontrados 257 resultados para: Justo

  • Esta es la historia de Noé. Noé era un hombre justo, irreprochable entre sus contemporáneos, y siguió siempre los caminos de Dios. (Génesis 6, 9)

  • Entonces el Señor dijo a Noé: "Entra en el arca, junto con toda tu familia, porque he visto que eres el único verdaderamente justo en medio de esta generación. (Génesis 7, 1)

  • Entonces uno de ellos le dijo: "Volveré a verte sin falta en el año entrante, y para ese entonces Sara habrá tenido un hijo". Mientras tanto, Sara había estado escuchando a la entrada de la carpa, que estaba justo detrás de él. (Génesis 18, 10)

  • Porque yo lo he elegido para que enseñe a sus hijos, y a su familia después de él, que se mantengan en el camino del Señor, practicando lo que es justo y recto. Así el Señor hará por Abraham lo que ha predicho acerca de él". (Génesis 18, 19)

  • Entonces Abraham se le acercó y le dijo: "¿Así que vas a exterminar al justo junto con el culpable? (Génesis 18, 23)

  • ¡Lejos de ti hacer semejante cosa! ¡Matar al justo juntamente con el culpable, haciendo que los dos corran la misma suerte! ¡Lejos de ti! ¿Acaso el Juez de toda la tierra no va a hacer justicia?". (Génesis 18, 25)

  • Esa noche yo pasaré por el país de Egipto para exterminar a todos sus primogénitos, tanto hombres como animales, y daré un justo escarmiento a los dioses de Egipto. Yo soy el Señor. (Exodo 12, 12)

  • mientras los egipcios enterraban a sus primogénitos, que el Señor había herido de muerte, dando así un justo escarmiento a sus dioses. (Números 33, 4)

  • Ahora nos tienes en tus manos; trátanos como te parezca más conveniente y justo". (Josué 9, 25)

  • Y el sol se detuvo, y la luna permaneció inmóvil, hasta que el pueblo se vengó de sus enemigos. ¿No está eso escrito en el libro del Justo? El sol se mantuvo inmóvil en medio del cielo y dejó de correr hacia el poniente casi un día entero. (Josué 10, 13)

  • y ordenó enseñarlo a la gente de Judá. Es el canto del Arco, y está escrito en el libro del Justo: (II Samuel 1, 18)

  • El rey continuó diciendo: "¿No está la mano de Joab detrás de todo esto?". La mujer asintió: "¡Por tu vida, mi señor y rey, tu pregunta ha dado justo en el blanco! Sí, tu servidor Joab es el que me mandó y puso todas estas palabras en boca de tu servidora. (II Samuel 14, 19)


“Aquele que procura a vaidade das roupas não conseguirá jamais se revestir com a vida de Jesus Cristo.” São Padre Pio de Pietrelcina