Encontrados 51 resultados para: Tumba

  • Sobre su tumba Jacob erigió un monumento, el mismo que está en esa tumba hasta el día de hoy. (Génesis 35, 20)

  • Jacob insistió: "Mi hijo no irá con ustedes, porque su hermano ya murió y ahora queda él solo. Si le sucede una desgracia durante el viaje que van a realizar, ustedes me harán bajar a la tumba lleno de aflicción". (Génesis 42, 38)

  • Si ahora ustedes me quitan también a este, y le sucede una desgracia, me harán bajar a la tumba lleno de aflicción’. (Génesis 44, 29)

  • apenas vea que falta su hijo, morirá; y nosotros lo habremos hecho bajar a la tumba lleno de aflicción. (Génesis 44, 31)

  • En una oportunidad mi padre me dijo, obligándome bajo juramento: ‘Cuando yo muera, asegúrate de que me entierren en la tumba que me hice preparar en el país de Canaán’. ¿Puedo ir a sepultar a mi padre y luego regresar?". (Génesis 50, 5)

  • Y cualquiera que toque, en campo abierto, a una persona que fue asesinada o murió naturalmente, o huesos humanos, o una tumba, será impuro durante siete días. (Números 19, 16)

  • Luego una persona pura tomará un ramillete de hisopo, lo sumergirá en el agua, y rociará la carpa, las vasijas y las personas que estuvieron allí o que tocaron los huesos, la persona asesinada o que murió de muerte natural, o la tumba. (Números 19, 18)

  • Gedeón, hijo de Joás, murió después de una feliz vejez, y fue enterrado en la tumba de su padre Joás, en Ofrá de Abiézer. (Jueces 8, 32)

  • Sus hermanos y toda la familia de su padre bajaron y se llevaron el cadáver. Luego subieron de nuevo y lo sepultaron en la tumba de su padre Manóaj, entre Sorá y Estaol. Él había juzgado a Israel durante veinte años. (Jueces 16, 31)

  • Hoy mismo, cuando te hayas alejado de mí, encontrarás a dos hombres cerca de la tumba de Raquel, en territorio de Benjamín, en Selsáj. Ellos te dirán: ‘Han hallado las asnas que habías ido a buscar. Ahora tu padre ya no piensa más en ese asunto, y está inquieto por ustedes, diciendo: ¿Qué puedo hacer por mi hijo?’. (I Samuel 10, 2)

  • Joab y sus hombres se llevaron el cadáver de Asael y lo sepultaron en la tumba de su padre, que está en Belén. Después de caminar toda la noche, llegaron a Hebrón cuando despuntaba el día. (II Samuel 2, 32)

  • cuando sepultaron a Abner en Hebrón. El rey prorrumpió en sollozos ante la tumba de Abner, y todo el pueblo se puso a llorar. (II Samuel 3, 32)


“É sempre necessário ir para a frente, nunca para trás, na vida espiritual. O barco que pára em vez de ir adiante é empurrado para trás pelo vento.” São Padre Pio de Pietrelcina