Encontrados 197 resultados para: derecho

  • Por el contrario, si digo al malvado: "Morirás", pero él se convierte de su pecado y practica el derecho y la justicia: (Ezequiel 33, 14)

  • No quedará contra él el recuerdo de ninguno de los pecados que cometió: ha practicado el derecho y la justicia, por eso vivirá. (Ezequiel 33, 16)

  • Y cuando el malvado se convierte de su maldad y practica el derecho y la justicia, vive a causa de eso. (Ezequiel 33, 19)

  • Así habla el Señor: ¡Ya es demasiado, príncipes de Israel! Acaben con la violencia y la depredación, practiquen el derecho y la justicia, dejen de extorsionar a mi pueblo -oráculo del Señor-. (Ezequiel 45, 9)

  • Así habla el Señor: Si el príncipe hace a alguno de sus hijos un regalo tomado de su herencia, el regalo pertenecerá a su hijo: será su propiedad por derecho hereditario. (Ezequiel 46, 16)

  • El hombre me hizo volver a la entrada de la Casa, y vi que salía agua por debajo del umbral de la Casa, en dirección al oriente, porque la fachada de la Casa miraba hacia el oriente. El agua descendía por debajo del costado derecho de la Casa, al sur del altar. (Ezequiel 47, 1)

  • Luego me sacó por el camino de la puerta septentrional, y me hizo dar la vuelta por un camino exterior, hasta la puerta exterior que miraba hacia el oriente. Allí vi que el agua fluía por el costado derecho. (Ezequiel 47, 2)

  • Yo te desposaré para siempre, te desposaré en la justicia y el derecho, en el amor y la misericordia; (Oseas 2, 21)

  • Efraím está oprimido, se ha conculcado el derecho, porque él había resuelto ir detrás de la inmundicia. (Oseas 5, 11)

  • Se pronuncian palabras, se jura en falso, se firman alianzas, mientras el derecho crece como la hierba venenosa en los surcos de los campos. (Oseas 10, 4)

  • ¡Ay de los que convierten el derecho en veneno y echan por tierra la justicia! (Amós 5, 7)

  • Aborrezcan el mal, amen el bien, y hagan triunfar el derecho en la Puerta: tal vez el Señor, Dios de los ejércitos, tenga piedad del resto de José. (Amós 5, 15)


Uma filha espiritual perguntou a Padre Pio: “O Senhor cura tantas pessoas, por que não cura esta sua filha espiritual?” Padre Pio respondeu-lhe em voz baixa: “E não nos oferecemos a Deus?” São Padre Pio de Pietrelcina