Encontrados 87 resultados para: mensajeros

  • Después Jacob envió unos mensajeros a su hermano Esaú -que vivía en la región de Seír, en las estepas de Edóm- (Génesis 32, 4)

  • Pero los mensajeros regresaron con esta noticia: "Fuimos a ver a tu hermano Esaú, y ahora viene a tu encuentro acompañado de cuatrocientos hombres". (Génesis 32, 7)

  • Moisés envió desde Cades unos mensajeros al rey de Edóm, con esta propuesta: "Así habla tu hermano Israel: ‘Tú conoces todas las dificultades con que hemos tropezado. (Números 20, 14)

  • Israel envió unos mensajeros a Sijón, rey de los amorreos, con esta propuesta: (Números 21, 21)

  • envió unos mensajeros a Balaam, hijo de Beor -que vivía en Petor, junto al Éufrates, en el país de los descendientes de Amav- para que le hicieran esta invitación: "Un pueblo que salió de Egipto y cubrió toda la tierra se ha establecido frente a mí. (Números 22, 5)

  • Balaam le respondió: "Ya le había anticipado a los mensajeros que me enviaste: (Números 24, 12)

  • Desde el desierto de Quedemot envié mensajeros a Sijón, rey de Jesbón, con la siguiente propuesta de paz: (Deuteronomio 2, 26)

  • Cuando Iabín, rey de Jasor, se enteró de lo que había sucedido, envió mensajeros al rey Iobab de Madón, al rey de Simrón y al de Acsaf; (Josué 11, 1)

  • Envió mensajeros por todo el territorio de Manasés, y ellos también se le unieron. Lo mismo hizo en Aser, en Zabulón y en Neftalí, y todos ellos acudieron al encuentro. (Jueces 6, 35)

  • Gedeón envió mensajeros por toda la montaña de Efraím, para que dijeran: "Bajen al encuentro de Madián y ocupen antes que ellos los vados hasta Bet Bará y el Jordán". Los hombres de Efraím se reunieron y ocuparon los vados hasta Bet Bará y el Jordán. (Jueces 7, 24)

  • y envió disimuladamente mensajeros a Arumá, donde estaba Abimélec, para avisarle: "Gaal, hijo de Ebed, ha llegado a Siquém con sus hermanos, y está sublevando la ciudad contra ti. (Jueces 9, 31)

  • Después, Jefté envió mensajeros al rey de los amonitas, para decirle: "¿Qué tenemos que ver tú y yo, para que vengas a atacarme en mi propio país?". (Jueces 11, 12)


“O amor sem temor torna-se presunção.” São Padre Pio de Pietrelcina