Encontrados 29 resultados para: prudente

  • Por eso, es necesario que el Faraón busque un hombre prudente y sabio, y lo ponga al frente de todo Egipto. (Génesis 41, 33)

  • Y dirigiéndose a José, le expresó: "Ya que Dios te ha hecho conocer todas estas cosas, no hay nadie que sea tan prudente y sabio como tú. (Génesis 41, 39)

  • Obsérvenlos y pónganlos en práctica, porque así serán sabios y prudentes a los ojos de los pueblos, que al oír todas estas leyes, dirán: "¡Realmente es un pueblo sabio y prudente esta gran nación!". (Deuteronomio 4, 6)

  • yo voy a obrar conforme a lo que dices: Te doy un corazón sabio y prudente, de manera que no ha habido nadie como tú antes de ti, ni habrá nadie como tú después de ti. (I Reyes 3, 12)

  • La puerta oriental le tocó en suerte a Selemías. Después sortearon la puerta del norte, y esta le tocó en suerte a su hijo Zacarías, que era prudente consejero. (I Crónicas 26, 14)

  • Jonatán, tío de David, hombre prudente e instruido, era consejero. Iejiel, hijo de Iacmoní, era preceptor de los hijos del rey. (I Crónicas 27, 32)

  • Y agregaba: "¡Bendito sea el Señor, el Dios de Israel! Él hizo el cielo y la tierra, y dio al rey David un hijo sabio, prudente e inteligente que construirá una Casa para el Señor y un palacio real para sí mismo. (II Crónicas 2, 11)

  • Soy más prudente que todos mis maestros, porque siempre medito tus prescripciones. (Salmos 119, 99)

  • El necio manifiesta en seguida su disgusto, pero el hombre prudente disimula una afrenta. (Proverbios 12, 16)

  • El hombre prudente disimula lo que sabe, pero el corazón de los necios proclama su insensatez. (Proverbios 12, 23)

  • El hombre prudente sabe bien lo que hace, pero el necio va ostentando su insensatez. (Proverbios 13, 16)

  • La sabiduría del prudente es saber discernir su camino, la insensatez de los necios es puro engaño. (Proverbios 14, 8)


“Caminhe com alegria e com o coração o mais sincero e aberto que puder. E quando não conseguir manter esta santa alegria, ao menos não perca nunca o valor e a confiança em Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina