Encontrados 22 resultados para: Atrios

  • ¡Rendid a Yahveh la gloria de su Nombre! Traed ofrendas y en sus atrios entrad. ¡Postraos ante Yahveh en esplendor sagrado! (I Crónicas 16, 29)

  • Estaban a las órdenes de los hijos de Aarón, para el servicio de la Casa de Yahveh, teniendo a su cargo los atrios y las cámaras, la limpieza de todas las cosas sagradas y la obra del servicio de la Casa de Dios; (I Crónicas 23, 28)

  • Y El me dijo: "Tú hijo Salomón edificará mi Casa y mis atrios; porque le he escogido a él por hijo mío, y yo seré para él padre. (I Crónicas 28, 6)

  • y también el diseño de todo lo que tenía en su mente respecto de los atrios de la Casa de Yahveh, y de todas las camaras de alrededor, para los tesoros de la Casa de Dios y los tesoros de las cosas sagradas; (I Crónicas 28, 12)

  • otro tercio, en la casa del rey; y otro tercio, en la casa del Fundamento; mientras que todo el pueblo estará en los atrios de la Casa de Yahveh. (II Crónicas 23, 5)

  • Salió el pueblo y trajeron ramas y se hicieron cabañas, cada uno en su terrado, en sus patios, en los atrios de la Casa de Dios, en la plaza de la puerta del Agua y en la plaza de la puerta de Efraím. (Nehemías 8, 16)

  • Dichoso tu elegido, tu privado, en tus atrios habita. ¡Oh, hartémonos de los bienes de tu Casa, de las cosas santas de tu Templo! (Salmos 65, 5)

  • Anhela mi alma y languidece tras de los atrios de Yahveh, mi corazón y mi carne gritan de alegría hacia el Dios vivo. (Salmos 84, 3)

  • Vale más un día en tus atrios que mil en mis mansiones, estar en el umbral de la Casa de mi Dios que habitar en las tiendas de impiedad. (Salmos 84, 11)

  • Plantados en la Casa de Yahveh, dan flores en los atrios del Dios nuestro. (Salmos 92, 14)

  • rendid a Yahveh la gloria de su nombre. Traed ofrendas y en sus atrios entrad, (Salmos 96, 8)

  • ¡Entrad en sus pórticos con acciones de gracias, con alabanzas en sus atrios, dadle gracias, bendecid su nombre! (Salmos 100, 4)


“No juízo final daremos contas a Deus até de uma palavra inútil que tenhamos dito.” São Padre Pio de Pietrelcina