Encontrados 59 resultados para: carga

  • Aunque ve que el reposo es bueno, y que el suelo es agradable, ofrece su lomo a la carga y termina sometiéndose al trabajo. (Génesis 49, 15)

  • Ellos juzgarán al pueblo en todo momento; te presentarán a ti los asuntos más graves, pero en los asuntos de menor importancia, juzgarán ellos. Así se aliviará tu carga, pues ellos te ayudarán a llevarla. (Exodo 18, 22)

  • Si ves caído bajo la carga el asno del que te aborrece, no rehúses tu ayuda. Acude a ayudarle. (Exodo 23, 5)

  • Si alguien peca en uno de estos casos: Uno ha oído la fórmula conjuratoria, y es testigo, porque lo ha visto u oído, y no lo declara y se carga así con su iniquidad; (Levítico 5, 1)

  • Si uno consagra parte del campo de su propiedad a Yahveh, será estimado según su sembradura, a razón de cincuenta siclos de plata por cada carga de cebada de sembradura. (Levítico 27, 16)

  • Después que Aarón y sus hijos hayan terminado de envolver las cosas sagradas con todos sus utensilios, al ponerse en marcha el campamento, llegarán los hijos de Quehat para transportarlas; pero que no toquen lo sagrado pues morirían. Esta es la carga de los hijos de Quehat en la Tienda del Encuentro. (Números 4, 15)

  • Haced con ellos de esta manera, para que vivan y no mueran al acercarse a las cosas sacratísimas: Aarón y sus hijos irán y pondrán a cada uno en su servicio y junto a su carga. (Números 4, 19)

  • Este será el servicio de los clanes guersonitas, su servicio y su carga. (Números 4, 24)

  • Se hizo su censo por orden de Yahveh transmitida por Moisés, asignando a cada uno su servicio y su carga: su censo se hizo tal como lo había ordenado Yahveh a Moisés. (Números 4, 49)

  • Pero a los hijos de Quehat no les dio, porque su carga sagrada la tenían que llevar al hombro. (Números 7, 9)

  • y le dijo a Yahveh: «¿Por qué tratas mal a tu siervo? ¿Por qué no he hallado gracia a tus ojos, para que hayas echado sobre mí la carga de todo este pueblo? (Números 11, 11)

  • Yo bajaré a hablar contigo; tomaré parte del espíritu que hay en ti y lo pondré en ellos, para que lleven contigo la carga del pueblo y no la tengas que llevar tú solo. (Números 11, 17)


“Há alegrias tão sublimes e dores tão profundas que não se consegue exprimir com palavras. O silêncio é o último recurso da alma, quando ela está inefavelmente feliz ou extremamente oprimida!” São Padre Pio de Pietrelcina