Encontrados 17 resultados para: tendido

  • Cuando el rey de Ay vio la situación, salió a toda prisa a presentar batalla contra Israel, él y todo su pueblo, en la pendiente de frente a la Arabá; pero sin saber que le habían tendido una emboscada por detrás de la ciudad. (Josué 8, 14)

  • Los de Benjamín se dieron cuenta de que estaban derrotados. Los israelitas habían cedido terreno a Benjamín porque confiaban en la emboscada que habían tendido junto a Guibeá. (Jueces 20, 36)

  • Éste se fue; un león le salió por el camino y lo mató, quedando su cadáver tendido en el camino. El asno y el león se quedaron junto al cadáver. (I Reyes 13, 24)

  • Unos hombres que pasaban vieron el cadáver tendido en el camino y el león al lado, llegaron a la ciudad del profeta anciano y lo contaron. (I Reyes 13, 25)

  • Partió y halló el cadáver del otro tendido en el camino, y el asno y el león de pie junto al cadáver. El león no había devorado el cadáver ni había despedazado al asno. (I Reyes 13, 28)

  • Al no responder nadie, entró en el dormitorio y lo encontró tendido en el suelo, muerto, con el cuerpo sin cabeza. (Judit 14, 15)

  • "¡Las esclavas nos han traicionado! Una mujer hebrea ha cubierto de vergüenza la casa de Nabucodonosor. Holofernes está tendido en el suelo sin cabeza". (Judit 14, 18)

  • sácame de la red que me han tendido, pues tú eres mi refugio. (Salmos 31, 5)

  • Pues sin motivo me han tendido su red, sin motivo han cavado una fosa para mí; (Salmos 35, 7)

  • He tendido sin cesar mis manos hacia un pueblo rebelde, que caminaba por el mal camino tras sus propios caprichos; (Isaías 65, 2)

  • ¡Óiganse salir gemidos de sus casas cuando, de improviso, mandes tú contra ellos hordas de saqueadores! Pues han cavado una fosa para cazarme y han tendido lazos a mis pies. (Jeremías 18, 22)

  • ¡Te he tendido un lazo y has quedado presa, Babilonia, sin que lo advirtieses! Has sido prendida y dominada por haberte enfrentado con el Señor. (Jeremías 50, 24)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina