Encontrados 83 resultados para: visión

  • Después de todo esto, la palabra del Señor fue dirigida a Abrán en una visión. Dijo: "No temas, Abrán, yo soy tu escudo. Tu recompensa será muy grande". (Génesis 15, 1)

  • Y Dios habló a Israel en una visión nocturna: "¡Jacob! ¡Jacob!". Él respondió: "Aquí estoy". (Génesis 46, 2)

  • Moisés se dijo: "Voy a acercarme a ver esta gran visión; por qué la zarza no se consume". (Exodo 3, 3)

  • una llama que salía de la presencia del Señor consumió el holocausto y las grasas sobre el altar. Ante esta visión, todo el pueblo lanzó gritos de alegría y cayeron rostro en tierra. (Levítico 9, 24)

  • El Señor les dijo: "Escuchad mis palabras: Cuando hay entre vosotros un profeta del Señor, yo me doy a conocer a él en visión y le hablo en sueños. (Números 12, 6)

  • Samuel siguió acostado hasta la mañana, y entonces abrió las puertas del templo del Señor. Samuel tenía miedo de contar a Elí la visión que había tenido. (I Samuel 3, 15)

  • Salomón comenzó la construcción del templo del Señor en Jerusalén, sobre el monte Moria, allí donde su padre había tenido la visión. Era el lugar preparado por David en la era de Ornán, el jebuseo. (II Crónicas 3, 1)

  • El resto de la historia de Salomón, desde el principio al fin, está escrito en las crónicas de Natán, profeta, en la profecía de Ajías de Silo y en la visión de Idó, el vidente, sobre Jeroboán, hijo de Nabat. (II Crónicas 9, 29)

  • El resto de la historia de Ezequías y sus obras de piedad están escritas en la visión del profeta Isaías, hijo de Amós, en el libro de los reyes de Judá y de Israel. (II Crónicas 32, 32)

  • Volará como un sueño inaprensible, se esfumará como visión nocturna. (Job 20, 8)

  • Tal visión los llenó de pánico. Al ver luego en la llanura al ejército de Judas dispuesto para la lucha, (I Macabeos 4, 21)

  • Cuando no hay visión profética, el pueblo vive sin freno; dichosos los que observan la ley. (Proverbios 29, 18)


“O Senhor nos dá tantas graças e nós pensamos que tocamos o céu com um dedo. Não sabemos, no entanto, que para crescer precisamos de pão duro, das cruzes, das humilhações, das provações e das contradições.” São Padre Pio de Pietrelcina