6. El joven abrió el pez y sacó la hiel, el corazón y el hígado. Luego cocieron el pez y se lo comieron. Después continuaron su camino hasta cerca de Media.





“Não abandone sua alma à tentação, diz o Espírito Santo, já que a alegria do coração é a vida da alma e uma fonte inexaurível de santidade.” São Padre Pio de Pietrelcina