Gefunden 57 Ergebnisse für: Carga

  • Encontró un buen lugar de descanso, y como vio que el país era agradable. inclinó su espalda a la carga: pasará a ser esclavo. (Génesis 49, 15)

  • Acabarás por agotarte tú y este pueblo que está contigo; pues la carga es demasiado pesada para ti y no puedes llevarla tú solo. (Exodo 18, 18)

  • Ellos harán de jueces para tu pueblo a cualquier hora; te presentarán los asuntos más graves, pero decidirán ellos mismos en los asuntos de menos importancia. Así se aliviará tu carga pues ellos la llevarán contigo. (Exodo 18, 22)

  • Si ves caído con la carga al burro del que te quiere mal, no pases de largo, sino ayúdalo a levantarlo. (Exodo 23, 5)

  • Si alguno ha pecado, haciendo alguna cosa de las prohibidas por la ley de Dios, ha cometido un delito aunque no se dé cuenta, y carga con un pecado. (Levítico 5, 17)

  • Si uno consagra a Yavé un campo de su propiedad, su valor se medirá según la cantidad de semilla que se le echa, a razón de cincuenta siclos de plata por cada carga de cebada de sembradura. (Levítico 27, 16)

  • Hagan con ellos de esta manera, para que vivan y no mueran cuando se acercan a las cosas muy sagradas. Aarón y sus hijos se adelantarán para poner a cada uno en su servicio y darle su carga, (Números 4, 19)

  • Pero no dio ni buey ni carreta a los hijos de Quehat, porque estaban a cargo del servicio del santuario y llevaban su carga al hombro. (Números 7, 9)

  • Le dijo a Yavé: "¿Por qué tratas tan mal a tu servidor? ¡No me has hecho ningún favor al imponerme la carga de todo este pueblo! (Números 11, 11)

  • Bajaré y hablaré contigo; luego tomaré de mi espíritu que está en ti y se lo pondré a ellos. Llevarán contigo la carga del pueblo y ya no tendrás que llevarla solo. (Números 11, 17)

  • David le dijo: «Si vas conmigo, serás para mí una carga. (2 Samuel 15, 33)

  • ¿Para qué voy a ser una carga para ti? Te acompañaré un poco más allá del Jordán, pero no veo por qué me concedes esta recompensa. (2 Samuel 19, 37)


“Feliz a alma que atinge o nível de perfeição que Deus deseja!” São Padre Pio de Pietrelcina