Gefunden 23 Ergebnisse für: mandaba

  • Al fin, habiendo partido del Horeb, enfrentamos aquel enorme y temible desierto que vieron, camino de la montaña del amorreo, como Yavé nos lo mandaba, y llegamos a Cadés Barné. (Deuteronomio 1, 19)

  • Cuando se sentían con fuerza para atacar, Yavé se ponía contra ellos y les mandaba la mala suerte, como se lo había advertido y dicho con juramento. Su situación llegó a ser muy angustiosa. (Jueces 2, 15)

  • Apenas el hombre nombró el Arca de Dios, Helí cayó de su silla hacia atrás junto a la puerta, se rompió la nuca y murió, pues era viejo y pesado. Hacía cuarenta años que mandaba en Israel. (1 Samuel 4, 18)

  • Banaías, hijo de Yoyadá, mandaba a los que reteos y peleteos. Los hijos de David eran sacer dotes. (2 Samuel 8, 18)

  • Es que Salomón mandaba, desde Tifsaj hasta Gaza, a todos los reyes al occidente del río Eufrates. Tuvo paz en todas sus fronteras. (1 Reyes 4, 24)

  • Sivsa era secretario; Benaías, hijo de Jeovadá, mandaba a los cereteos y peleteos. Pero los hijos de David eran primeros al lado del rey. (1 Crónicas 18, 17)

  • Esta es la lista por sus casas paternas: Por la tribu de Judá: Adua mandaba los jefes de millares; trescientos mil hombres valientes estaban a su cargo. (2 Crónicas 17, 14)

  • Sus ayudantes eran: Yojanan, el cual mandaba a doscientos ochenta mil hombres, (2 Crónicas 17, 15)

  • y Amasías, hijo de Zicrí, que servía como voluntario para Yavé y mandaba a doscientos mil hombres valientes. (2 Crónicas 17, 16)

  • Incluso llegaron a hablar bien de Tobías en mi presencia, al mismo tiempo que le contaban todas mis palabras. Y era éste, Tobías, quien me mandaba cartas para asustarme. (Nehemías 6, 19)

  • Pero la reina se negó a cumplir la orden que el rey le mandaba con sus sirvientes. (Ester 1, 12)

  • Por orden del soberano, los mensajeros llevaron, en el menor tiempo posible, a todas las provincias del imperio las cartas en que se mandaba masacrar, asesinar y exterminar a todos los judíos, fueran jóvenes o viejos, niños o mujeres, y apoderarse de sus bienes. (Ester 3, 13)


“Submeter-se não significa ser escravo, mas ser livre para receber santos conselhos.” São Padre Pio de Pietrelcina