Gefunden 15 Ergebnisse für: Manantiales

  • Sí, el Señor, tu Dios, te va a introducir en una tierra fértil, un país de torrentes, de manantiales y de aguas profundas que brotan del valle y de la montaña; (Deuteronomio 8, 7)

  • Ajab dijo a Abdías: "Vamos a recorrer todos los manantiales y torrentes del país. Tal vez encontremos pasto para conservar con vida los caballos y las mulas, y así no tendremos que sacrificar ganado". (I Reyes 18, 5)

  • luego examinó los accesos de la ciudad; inspeccionó los manantiales y se apoderó de ellos, colocando allí puestos de guardia. Después volvió a reunirse con sus tropas. (Judit 7, 7)

  • Un destacamento de amonitas partió acompañado de cinco mil asirios. Ellos acamparon en el valle, y se apoderaron de los depósitos de agua y de los manantiales de los israelitas. (Judit 7, 17)

  • Hiciste brotar manantiales y torrentes, secaste los ríos caudalosos; (Salmos 74, 15)

  • sacó manantiales del peñasco, hizo correr las aguas como ríos. (Salmos 78, 16)

  • el que convierte las rocas en estanques, y los peñascos en manantiales. (Salmos 114, 8)

  • el páramo se convertirá en un estanque y la tierra sedienta en manantiales; la morada donde se recostaban los chacales será un paraje de caña y papiros. (Isaías 35, 7)

  • Haré brotar ríos en las cumbres desiertas y manantiales en medio de los valles; convertiré el desierto en estanques, la tierra árida en vertientes de agua. (Isaías 41, 18)

  • Manantiales, bendigan al Señor, ¡alábenlo y glorifíquenlo eternamente! (Daniel 3, 77)

  • el que cree en mí». Como dice la Escritura: De su seno brotarán manantiales de agua viva. (Juan 7, 38)

  • Porque el Cordero que está en medio del trono será su Pastor y los conducirá hacia los manantiales de agua viva. Y Dios secará toda lágrima de sus ojos». (Apocalipsis 7, 17)


“Por que a tentação passada deixa na alma uma certa perturbação? perguntou um penitente a Padre Pio. Ele respondeu: “Você já presenciou um tremor de terra? Quando tudo estremece a sua volta, você também é sacudido; no entanto, não necessariamente fica enterrado nos destroços!” São Padre Pio de Pietrelcina