Gefunden 18 Ergebnisse für: reparar

  • Nunca te llevé un animal despedazado por las fieras: yo mismo debía reparar la pérdida, porque tú me reclamabas lo que había sido robado tanto de día como de noche. (Génesis 31, 39)

  • o todo aquello sobre lo cual juró en falso. Los restituirá íntegramente, añadiendo un quinto más, que entregará al verdadero propietario en el momento de reparar su falta. (Levítico 5, 24)

  • El sacerdote practicará el rito de expiación en favor de toda la comunidad, y esta será perdonada, porque se trata de un error, y ellos, para reparar ese error, presentaron delante del Señor su ofrenda -una ofrenda que se quema para el Señor- y su sacrificio por el pecado. (Números 15, 25)

  • Por eso, todos los israelitas tenían que acudir a los filisteos para reparar sus azadas, sus rejas de arado, sus hachas y sus hoces. (I Samuel 13, 20)

  • Había que pagar dos tercios de siclo por las azadas y las rejas de arado, y un tercio de siclo por afilar las hachas y reparar las picanas. (I Samuel 13, 21)

  • lo recibirán los sacerdotes para sí mismos, cada uno de la gente que conoce, y tendrán que reparar las partes deterioradas de la Casa, allí donde sea necesario". (II Reyes 12, 6)

  • Entonces el rey Joás llamó al sacerdote Iehoiadá y a los demás sacerdotes, y les dijo: "¿Por qué no reparan las partes deterioradas de la Casa? En adelante, ya no recibirán más dinero de la gente que conocen, sino que lo entregarán para reparar la Casa". (II Reyes 12, 8)

  • Los sacerdotes estuvieron de acuerdo en no recibir dinero del pueblo y en tener que reparar las partes deterioradas de la Casa. (II Reyes 12, 9)

  • a los albañiles y a los talladores de piedras, y también para comprar la madera y las piedras talladas con que se reparaba la Casa del Señor. Así se cubrían todos los gastos necesarios para reparar la Casa. (II Reyes 12, 13)

  • sino que se lo entregaba a los que dirigían las obras, y ellos lo empleaban para reparar la Casa del Señor. (II Reyes 12, 15)

  • Que se la entreguen a los que dirigen las obras, a los supervisores de la Casa del Señor, para que paguen a los que trabajan en reparar las partes deterioradas de la Casa del Señor (II Reyes 22, 5)

  • -a los carpinteros, a los constructores y albañiles- y se pueda comprar la madera y las piedras talladas necesarias para reparar la Casa. (II Reyes 22, 6)


“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina