Gefunden 39 Ergebnisse für: Longitud

  • Así es como la harás: longitud del arca, trescientos codos; su anchura, cincuenta codos; y su altura, treinta codos. (Génesis 6, 15)

  • La longitud de cada tapiz será de veintiocho codos y la anchura de cuatro. Todos los tapices tendrán las mismas medidas. (Exodo 26, 2)

  • La longitud de cada pieza será de treinta codos; de cuatro, la anchura. Las once piezas tendrán las mismas medidas. (Exodo 26, 8)

  • Lo que excede en longitud de las piezas de la Tienda - un codo por cada lado - se extenderá a ambos lados de la Morada, a un lado y a otro, para cubrirla. (Exodo 26, 13)

  • También harás el atrio de la Morada. Del lado del Négueb, hacia el sur, el atrio tendrá un cortinaje de lino fino torzal, en una longitud de cien codos a uno de los lados. (Exodo 27, 9)

  • A lo largo del lado septenrional habrá igualmente un cortinaje en una longitud de cien codos, con sus veinte postes que descansarán sobre veinte basas de bronce; los ganchos de los postes y sus varillas serán de plata. (Exodo 27, 11)

  • La longitud de cada tapiz era de veintiocho codos y la anchura de cuatro. Todos los tapices tenían las mismas medias. (Exodo 36, 9)

  • La longitud de cada pieza era de treinta codos y de cuatro la anchura. Las once piezas tenían las mismas medidas. (Exodo 36, 15)

  • No cometáis injustica en los juicios, ni en las medidas de longitud, de peso o de capacidad: (Levítico 19, 35)

  • Edificó la Casa «Bosque del Líbano», de cien codos de longitud, cincuenta codos de anchura y treinta codos de altura, sobre cuatro filas de columnas de cedro; había capiteles de cedro sobre las columnas. (I Reyes 7, 2)

  • Hizo el Pórtico de las columnas de cincuenta codos de longitud, treinta codos de anchura... con un pórtico por delante. (I Reyes 7, 6)

  • asimismo tenían a su cargo disponer en filas los panes, la flor de harina para la oblación, las tortas sin levadura, lo frito en la sartén, lo cocido y toda clase de medidas de capacidad y longitud. (I Crónicas 23, 29)


“No tumulto das paixões terrenas e das adversidades, surge a grande esperança da misericórdia inexorável de Deus. Corramos confiantes ao tribunal da penitência onde Ele, com ansiedade paterna, espera-nos a todo instante.” São Padre Pio de Pietrelcina