Gefunden 13 Ergebnisse für: Naturaleza

  • Porque Dios creó al hombre para la incorruptibilidad, le hizo imagen de su misma naturaleza; (Sabiduría 2, 23)

  • la naturaleza de los animales y los instintos de las fieras, el poder de los espíritus y los pensamientos de los hombres, las variedades de las plantas y las virtudes de las raíces. (Sabiduría 7, 20)

  • Sí, vanos por naturaleza todos los hombres en quienes había ignorancia de Dios y no fueron capaces de conocer por las cosas buenas que se ven a Aquél que es, ni, atendiendo a las obras, reconocieron al Artífice; (Sabiduría 13, 1)

  • Pues para preservar a tus hijos de todo daño, la creación entera, obediente a tus órdenes, se rehízo de nuevo en su propia naturaleza. (Sabiduría 19, 6)

  • Los elementos se adaptaron de una nueva manera entre sí como cambian la naturaleza del ritmo los sonidos en un salterio sin que cambie por eso su tonalidad, cosa que se puede deducir claramente examinando lo sucedido. (Sabiduría 19, 18)

  • Por eso los entregó Dios a pasiones infames; pues sus mujeres invirtieron las relaciones naturales por otras contra la naturaleza; (Romanos 1, 26)

  • Porque si tú fuiste cortado del olivo silvestre que eras por naturaleza, para ser injertado contra tu natural en un olivo cultivado, ¡con cuánta más razón ellos, según su naturaleza, serán injertados en su propio olivo! (Romanos 11, 24)

  • ¿No os enseña la misma naturaleza que es una afrenta para el hombre la cabellera, (I Corintios 11, 14)

  • Pero el de la esclava nació según la naturaleza; el de la libre, en virtud de la Promesa. (Gálatas 4, 23)

  • Pero, así como entonces el nacido según la naturaleza perseguía al nacido según el espíritu, así también ahora. (Gálatas 4, 29)

  • entre ellos vivíamos también todos nosotros en otro tiempo en medio de las concupiscencias de nuestra carne, siguiendo las apetencias de la carne y de los malos pensamientos, destinados por naturaleza, como los demás, a la Cólera... (Efesios 2, 3)

  • por medio de las cuales nos han sido concedidas las preciosas y sublimes promesas, para que por ellas os hicierais partícipes de la naturaleza divina, huyendo de la corrupción que hay en el mundo por la concupiscencia. (II Pedro 1, 4)


“É difícil tornar-se santo. Difícil, mas não impossível. A estrada da perfeição é longa, tão longa quanto a vida de cada um. O consolo é o repouso no decorrer do caminho. Mas, apenas restauradas as forças, é necessário levantar-se rapidamente e retomar a viagem!” São Padre Pio de Pietrelcina