Gefunden 14 Ergebnisse für: Preparada

  • Si tu ofrenda es una oblación preparada en la chapa, ha de ser de flor de harina, amasada con aceite, sin levadura. (Levítico 2, 5)

  • Si tu ofrenda es una oblación preparada en cazuela, se hará de flor de harina con aceite. (Levítico 2, 7)

  • La oblación que ha sido preparada con estas cosas, se la llevarás a Yahveh. Será presentada al sacerdote, quien la llevará al altar. (Levítico 2, 8)

  • Toda la oblación que ofrezcáis a Yahveh será preparada sin levadura, pues ni de fermento ni de miel quemaréis nada como manjar abrasado para Yahveh. (Levítico 2, 11)

  • Será preparada con aceite en la sartén; la ofrecerás bien frita y la presentarás partida en trozos como una oblación, como calmante aroma para Yahveh. (Levítico 6, 14)

  • También toda oblación cocida al horno y toda la preparada en cazuela o en sartén pertenece al sacerdote que la ofrece; (Levítico 7, 9)

  • Toda cosa comestible preparada con dicha agua será impura, y toda bebida que se beba en una de esas vasijas será impura. (Levítico 11, 34)

  • Jarboná, uno de los eunucos que estaban ante el rey, sugirió: «Precisamente, la horca que Amán había destinado para Mardoqueo, aquel cuyo informe fue tan útil al rey, está preparada en casa de Amán, y tiene cincuenta codos de altura.» Dijo el rey: «¡Colgadle de ella!» (Ester 7, 9)

  • Los que estaban encargados del banquete sacrificial contrario a la Ley, tomándole aparte en razón del conocimiento que de antiguo tenían con este hombre, le invitaban a traer carne preparada por él mismo, y que le fuera lícita; a simular como si comiera la mandada por el rey, tomada del sacrificio, (II Macabeos 6, 21)

  • También para ti, Judá, hay preparada una cosecha, cuando yo cambie la suerte de mi pueblo. (Oseas 6, 11)

  • Entonces dice a sus siervos: "La boda está preparada, pero los invitados no eran dignos. (Mateo 22, 8)

  • El os enseñará en el piso superior una sala grande, ya dispuesta y preparada; haced allí los preparativos para nosotros.» (Marcos 14, 15)


“Esforce-se, mesmo se for um pouco, mas sempre…” São Padre Pio de Pietrelcina