II Macabeos, 15
15. Después Jeremías extendió su mano derecha y entregó a Judas una espada de oro, diciendo mientras se la daba:
15. Después Jeremías extendió su mano derecha y entregó a Judas una espada de oro, diciendo mientras se la daba:
“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina