8. Entonces Judá dijo a su padre, Israel: "Deja venir conmigo al muchacho; salgamos inmediatamente, si queremos vivir y no morir nosotros, tú y nuestros hijos.





“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina