53. El rey ordenó que lo sacaran de donde estaba y que fuera a verlo. Cuando lo tuvo en su presencia le dijo: «Márchate a tu casa tranquilo.»





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina