Fundar 18 Resultados para: Estandarte

  • Luego Moisés edificó un altar, al que llamó "El Señor es mi estandarte". (Exodo 17, 15)

  • Los israelitas acamparán alrededor de la Carpa del Encuentro, a una cierta distancia, cada uno junto a su estandarte, bajo las insignias de sus casas paternas. (Números 2, 2)

  • Al frente, sobre el lado este, acamparán los regimientos que militan bajo el estandarte de Judá. El jefe de los descendientes de Judá era Najsón, hijo de Aminadab, (Números 2, 3)

  • Al sur, acamparán los regimientos que militan bajo el estandarte de Rubén. El jefe de los descendientes de Rubén era Elisur, hijo de Sedeur, (Números 2, 10)

  • Al oeste, acamparán los regimientos que militan bajo el estandarte de Efraím. El jefe de los descendientes de Efraím era Elisamá, hijo de Amihud, (Números 2, 18)

  • Al norte, acamparán los regimientos que militan bajo el estandarte de Dan. El jefe de los descendientes de Dan era Ajiézer, hijo de Amisadai, (Números 2, 25)

  • el primero en partir fue el estandarte de la división de Judá, distribuida por regimientos. Al frente de sus tropas iba Najsón, hijo de Aminadab; (Números 10, 14)

  • Luego avanzó el estandarte de la división de Rubén, distribuida por regimientos. Al frente de sus tropas iba Elisur, hijo de Sedeur; (Números 10, 18)

  • A continuación avanzó el estandarte de la división de Efraím, distribuida por regimientos. Al frente de sus tropas iba Elisamá, hijo de Amihud; (Números 10, 22)

  • Finalmente, a la retaguardia de todos los campamentos, avanzó el estandarte de la tribu de Dan, distribuida por regimientos. Al frente de sus tropas iba Ajiézer, hijo de Amisadai; (Números 10, 25)

  • Sobre un monte desierto alcen un estandarte, lancen un grito hacia ellos, agiten la mano, para que entren por las Puertas de los nobles. (Isaías 13, 2)

  • ¡Habitantes del mundo entero, y ustedes, los que pueblan la tierra: cuando se alce el estandarte, observen, cuando suene la trompeta, escuchen! (Isaías 18, 3)


“É doce o viver e o penar para trazer benefícios aos irmãos e para tantas almas que, vertiginosamente, desejam se justificar no mal, a despeito do Bem Supremo.” São Padre Pio de Pietrelcina