Fundar 18 Resultados para: Viñadores

  • Pero dejó una parte de la gente pobre del país como viñadores y cultivadores. (II Reyes 25, 12)

  • También construyó torres en el desierto y abrió muchas cisternas, porque tenía abundante ganado en la llanura y en la meseta. Tenía además labradores y viñadores en las montañas y en los viñedos, ya que era amante de la agricultura. (II Crónicas 26, 10)

  • Yo, el último en llegar, me mantuve alerta como quien recoge detrás de los viñadores. (Eclesiástico 33, 16)

  • Se presentarán extranjeros para apacentar sus rebaños, hijos de forasteros serán sus labradores y viñadores. (Isaías 61, 5)

  • Pero dejó una parte de la gente pobre del país como viñadores y cultivadores. (Jeremías 52, 16)

  • Aflíjanse, labradores, laméntense, viñadores, por el trigo y la cebada, porque se ha perdido la cosecha de los campos. (Joel 1, 11)

  • Escuchen otra parábola: Un hombre poseía una tierra y allí plantó una viña, la cercó, cavó un lagar y construyó una torre de vigilancia. Después la arrendó a unos viñadores y se fue al extranjero. (Mateo 21, 33)

  • Pero los viñadores se apoderaron de ellos, y a uno lo golpearon, a otro lo mataron y al tercero lo apedrearon. (Mateo 21, 35)

  • Pero, al verlo, los viñadores se dijeron: "Este es el heredero: vamos a matarlo para quedarnos con su herencia". (Mateo 21, 38)

  • Cuando vuelva el dueño, ¿qué les parece que hará con aquellos viñadores?». (Mateo 21, 40)

  • Jesús se puso a hablarles en parábolas: «Un hombre plantó una viña, la cercó, cavó un lagar y construyó una torre de vigilancia. Después la arrendó a unos viñadores y se fue al extranjero. (Marcos 12, 1)

  • A su debido tiempo, envió a un servidor para percibir de los viñadores la parte de los frutos que le correspondía. (Marcos 12, 2)


“Você deve ter sempre prudência e amor. A prudência tem olhos; o amor tem pernas. O amor, como tem pernas, gostaria de correr a Deus. Mas seu impulso de deslanchar na direção dEle é cego e, algumas vezes, pode tropeçar se não for guiado pela prudência, que tem olhos.” São Padre Pio de Pietrelcina