Fundar 336 Resultados para: Aarón

  • El Señor dijo a Moisés: "Di a Aarón: Extiende tu mano con tu bastón sobre los ríos, canales y estanques y haz subir las ranas por todo el territorio egipcio". (Exodo 8, 1)

  • Aarón extendió su mano sobre las aguas de Egipto, y las ranas subieron y cubrieron todo Egipto. (Exodo 8, 2)

  • El Faraón llamó a Moisés y a Aarón y les dijo: "Rogad al Señor que aleje las ranas de mí y de mi pueblo, y yo dejaré ir al pueblo para que ofrezca sacrificios al Señor". (Exodo 8, 4)

  • Moisés y Aarón salieron de la presencia del Faraón. Moisés suplicó al Señor en razón de la promesa hecha al Faraón respecto a las ranas. (Exodo 8, 8)

  • El Señor dijo a Moisés: "Di a Aarón: Extiende tu bastón y golpea el polvo de la tierra para que se convierta en mosquitos en todo el país de Egipto". (Exodo 8, 12)

  • Así lo hicieron. Aarón extendió su mano con su bastón, golpeó el polvo de la tierra, y enjambres de mosquitos se echaron sobre hombres y animales; todo el polvo de la tierra se convirtió en mosquitos en todo Egipto. (Exodo 8, 13)

  • El Faraón llamó a Moisés y a Aarón y les dijo: "Id y ofreced sacrificios a vuestro Dios en este país". (Exodo 8, 21)

  • El Señor dijo a Moisés y a Aarón: "Tomad un puñado de ceniza de horno y que Moisés la tire al aire en presencia del Faraón. (Exodo 9, 8)

  • El Faraón mandó llamar a Moisés y Aarón y les dijo: "Esta vez he pecado. El Señor es justo, y yo y mi pueblo, culpables. (Exodo 9, 27)

  • Moisés y Aarón se presentaron al Faraón, y le dijeron: "Esto dice el Señor, Dios de los hebreos: ¿Hasta cuándo te negarás a humillarte delante de mí? Deja salir a mi pueblo para que me sirva. (Exodo 10, 3)

  • Hicieron venir a Moisés y Aarón ante el Faraón, que les dijo: "Id a servir al Señor, vuestro Dios. Pero ¿quiénes sois los que habéis de ir? (Exodo 10, 8)

  • El Faraón llamó a toda prisa a Moisés y a Aarón y les dijo: "He pecado contra el Señor, vuestro Dios, y contra vosotros. (Exodo 10, 16)


“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina