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Moisés dijo: "No puede ser, pues ofreceríamos al Señor, nuestro Dios, sacrificios que los egipcios detestan. Si ofrecemos ante sus ojos sacrificios que ellos detestan, nos apedrearán. (Exodo 8, 22)
Pero el Señor hará distinción entre el ganado de los israelitas y el de los egipcios; de todo lo que pertenece a los israelitas nada perecerá". (Exodo 9, 4)
Al día siguiente lo llevó a cabo: todo el ganado de los egipcios murió, pero el de los israelitas no murió ni uno siquiera. (Exodo 9, 6)
Los magos no pudieron continuar delante de Moisés debido a las úlceras que aparecieron en ellos, igual que en todos los egipcios. (Exodo 9, 11)
para que cuentes a tus hijos y a tus nietos cómo traté yo a los egipcios y los prodigios que hice en medio de ellos, y sepáis que yo soy el Señor". (Exodo 10, 2)
Invadirá tus casas, las de tus servidores y las de todos los egipcios, como nunca vieron tus padres, ni tus abuelos, desde que aparecieron en la tierra hasta hoy". Moisés se retiró y salió de la casa del Faraón. (Exodo 10, 6)
Y el Señor concedió al pueblo el favor de los egipcios; hasta el mismo Moisés era considerado por los servidores del Faraón y por el pueblo. (Exodo 11, 3)
Pero entre los israelitas, desde el hombre al animal, ni siquiera ladrará un perro, para que sepáis la diferencia que hace el Señor entre los egipcios y los israelitas. (Exodo 11, 7)
El Señor pasará para castigar a los egipcios y, al ver la sangre en el dintel y en las dos jambas, pasará de largo; no permitirá al exterminador entrar en vuestras casas para herir. (Exodo 12, 23)
responderéis: Es el sacrificio de la pascua del Señor, el cual pasó de largo por las casas de los israelitas en Egipto, cuando hirió a los egipcios y preservó nuestras casas". El pueblo se postró y adoró. (Exodo 12, 27)
El Faraón se levantó de noche, él, todos sus servidores y todos los egipcios, y hubo llanto general en Egipto, porque no había casa donde no hubiera un muerto. (Exodo 12, 30)
Los egipcios instaban al pueblo a salir cuanto antes del país, porque decían: "Vamos a morir todos". (Exodo 12, 33)