20. Todos aguardaban el desenlace inminente. Los enemigos ya se habían concentrado y el ejército se había alineado en orden de batalla; los elefantes estaban situados en lugares estratégicos y la caballería se había ubicado en los flancos.





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina