11. Y nos han dado esta respuesta: Nosotros adoramos al Dios del cielo y de la tierra, y por eso estamos reconstruyendo el templo que fue construido y terminado hace muchos años por un gran rey de Israel.





“No tumulto das paixões terrenas e das adversidades, surge a grande esperança da misericórdia inexorável de Deus. Corramos confiantes ao tribunal da penitência onde Ele, com ansiedade paterna, espera-nos a todo instante.” São Padre Pio de Pietrelcina