7. Entonces el sacerdote le dio el pan santo, porque no había allí otro pan que el pan presentado al Señor, y ese mismo día se había retirado del altar para reemplazarlo por pan reciente.





“Quando ofendemos a justiça de Deus, apelamos à Sua misericórdia. Mas se ofendemos a Sua misericórdia, a quem podemos apelar? Ofender o Pai que nos ama e insultar quem nos auxilia é um pecado pelo qual seremos severamente julgados.” São Padre Pio de Pietrelcina