6. Prepararon igualmente las piedras ónices engastadas en oro y grabadas, como se graban los sellos, con los nombres de los hijos de Israel;





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina