Trouvé 317 Résultats pour: habitantes

  • Yavé la entregó con su rey a los israelitas, que la pasaron a cuchillo con todos sus habitantes sin perdonar a nadie. El rey experimentó la misma suerte que el de Jericó. (Josué 10, 30)

  • Yavé también le entregó esta ciudad con su rey y habitantes, que sufrieron la misma suerte de Libna. (Josué 10, 32)

  • El rey y los habitantes de Eglón también fueron acuchillados; la consagraron en anatema como habían hecho con Laquis. (Josué 10, 35)

  • pasó a cuchillo a su rey y habitantes, sin dejar ningún sobreviviente. Lo hizo tal como trató a Eglón: la consagró en anatema. (Josué 10, 37)

  • La tomó, así como a todos los pueblos que dependían de ella. Pasó a cuchillo a su rey y habitantes, consagrándolos en anatema, sin perdonar a nadie. Dabir y su rey recibieron el mismo castigo que Hebrón y Libna. (Josué 10, 39)

  • En esta ciudad pasó a cuchillo a todos sus habitantes, consagrándolos en anatema. (Josué 11, 11)

  • y todo el territorio de los habitantes de las montañas, desde el Líbano hasta Misrefat-Maím, los cuales son sidonios. Yo soy el que los derrotaré delante de los israelitas. Por lo tanto, procura que este país pase a ser parte de la herencia de Israel, tal como te lo he ordenado. (Josué 13, 6)

  • Y avanzando desde allí, subió a los habitantes de Dabir, que antes se llamaba Cariat-Sefer. (Josué 15, 15)

  • En efecto, Manasés tuvo por herencia, en Isacar y Aser, a Betsán con sus aldeas, a Jeblam con las suyas, a los habitantes de Dor con sus villas, y a los de Endor con sus aldeas; asimismo, a los habitantes de Tanac con sus aldeas, y a los de Meguido con las suyas, y la tercera parte de Nifet. (Josué 17, 11)

  • Los de Judá atacaron la ciudad de Jerusalén y, después de matar a sus habitantes, quemaron la ciudad. (Jueces 1, 8)

  • De allí marcharon contra los habitantes de Debir, que se llamaba Quiriat Sefer. (Jueces 1, 11)

  • Si bien conquistaron la zona montañosa con la ayuda de Yavé, no pudieron desalojar a los habitantes de la llanura, los cuales combatían con carros de hierro. (Jueces 1, 19)


“Na igreja se fala somente com Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina