Trouvé 67 Résultats pour: pasos

  • «Síganme, porque Yavé ha entregado a la gente de Moab, nuestro enemigo, en manos de ustedes.» Bajaron con él, cortaron los pasos del Jordán hacia Moab y no dejaron pasar a nadie. (Jueces 3, 28)

  • El guía los pasos de sus fieles y los malos desaparecen en las tinieblas, los fuertes no son ya los vencedores. (1 Samuel 2, 9)

  • Cuando escuches un ruido como de pasos entre las balsameras, entonces ataca rápidamente, porque Yavé sale delante de ti, para derrotar al ejército de los filisteos.» (2 Samuel 5, 24)

  • Después de dar los seis primeros pasos con el Arca, sacrificaron un buey y un ternero cebado. (2 Samuel 6, 13)

  • Miren, yo me voy a detener en los pasos del desierto esperando que ustedes me manden noticias.» (2 Samuel 15, 28)

  • Ahora comuníquenle a David que no pase la noche en los pasos del desierto, sino más allá, pues el rey y su ejército corren el riesgo de ser exterminados.» (2 Samuel 17, 16)

  • Alargas mis pasos cuando camino y mis tobillos no se doblan. (2 Samuel 22, 37)

  • Había tres filas de ventanas con celosías, cuarenta y cinco en total, quince por cada fila y cada una frente a otra cada tres pasos. (1 Reyes 7, 4)

  • Cuando pasaba la puerta, Ajías oyó sus pasos y le dijo: «Entra, esposa de Jeroboam, ¿por qué quieres pasar por otra? Tengo un duro mensaje para ti. (1 Reyes 14, 6)

  • Eliseo estaba sentado en su casa, y los dirigentes estaban sentados con él. Antes que llegara el mensajero, Eliseo les dijo: «¿No saben que este hijo de asesino ha mandado cortar mi cabeza? Pues bien, cuando llegue el mensajero, cierren la puerta y no lo dejen entrar. Detrás de él oigo el ruido de los pasos de su señor.» (2 Reyes 6, 32)

  • Siguió los pasos de los reyes de Israel y actuó en todo como la familia de Ajab; es que se había casado con una hija de Ajab y, debido a esto, se portó muy mal con Yavé. (2 Reyes 8, 18)

  • Siguió los pasos de Ajab y se portó mal con Yavé, como los de la familia de Ajab, porque había emparentado con Ajab. (2 Reyes 8, 27)


“Todas as graças que pedimos no nome de Jesus são concedidas pelo Pai eterno.” São Padre Pio de Pietrelcina