Trouvé 21 Résultats pour: Concubina

  • Su concubina, llamada Reumá, también dio a luz a Tébaj, Gájam, Tájas, y Maaká. (Génesis 22, 24)

  • Sucedió por entonces, mientras Israel residía en aquel país, que fue Rubén y se acostó con Bilhá, la concubina de su padre, e Israel se enteró de ello. Los hijos de Jacob fueron doce. (Génesis 35, 22)

  • Timná fue concubina de Elifaz, hijo de Esaú, y dio a luz a Amalec. Estos son los descendientes de Adá, mujer de Esaú. (Génesis 36, 12)

  • Y la concubina que tenía en Siquem, le dio a luz también un hijo, a quien puso por nombre Abimélek. (Jueces 8, 31)

  • En aquel tiempo, cuando aún no había rey en Israel, hubo un hombre, levita, que residía como forastero en los confines de la montaña de Efraím. Tomó por concubina a una mujer de Belén de Judá. (Jueces 19, 1)

  • Se enfadó con él su concubina y lo dejó para volver a la casa de su padre en Belén de Judá, donde permanició bastante tiempo, unos cuatro meses. (Jueces 19, 2)

  • Se levantaron para marchar el marido con su concubina y su siervo, pero su suegro, el padre de la joven, le dijo: «Mira que la tarde está al caer. Pasa aquí la noche y que se alegre tu corazón. Mañana de madrugada marcharéis y volverás a tu tienda.» (Jueces 19, 9)

  • Pero el hombre no quiso pasar la noche allí; se levantó, partió y llegó frente a Jebús, o sea, Jerusalén. Llevaba consigo los dos asnos cargados, su concubina y su criado. (Jueces 19, 10)

  • Pero aquellos hombres no quisieron escucharle. Entonces el hombre tomó a su concubina y se la sacó fuera. Ellos la conocieron, la maltrataron toda la noche hasta la mañana y la dejaron al amanecer. (Jueces 19, 25)

  • Por la mañana se levantó su marido, abrió las puertas de la casa y salió para continuar su camino; y vio que la mujer, su concubina, estaba tendida a la entrada de la casa, con las manos en el umbral, (Jueces 19, 27)

  • Llegado a su casa, cogió un cuchillo y tomando a su concubina la partió miembro por miembro en doce trozos y los envió por todo el territorio de Israel. (Jueces 19, 29)

  • El levita, marido de la mujer asesinada, tomó la palabra y dijo: «Había llegado yo con mi concubina a Guibeá de Benjamín para pasar la noche. (Jueces 20, 4)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina