12. Una vez que tomamos posesión del país, yo entregué a las tribus de Rubén y de Gad el territorio que se extiende desde Aroer, en el valle del Arnón, hasta la mitad de las montañas de Galaad, con sus ciudades.





“Meu Deus, perdoa-me. Nunca Te ofereci nada na minha vida e, agora, por este pouco que estou sofrendo, em comparação a tudo o que Tu sofreste na Cruz, eu reclamo injustamente!” São Padre Pio de Pietrelcina