17. Dios oyó los gritos del niño, y el ángel de Dios llamó desde el cielo a Agar y le dijo: "¿Qué te pasa, Agar? No temas, porque Dios ha oído los gritos del pequeño desde el lugar en que está.





“O Anjo de Deus não nos abandona jamais.” São Padre Pio de Pietrelcina