10. envió a Hadoram, su hijo, donde el rey David para saludarlo y para felicitarlo por haber atacado y vencido a Hadadezer, ya que Toú estaba en guerra con Hadadezer. Hadoram traía toda clase de objetos de oro, de plata y de bronce.





“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina