Génesis, 17

3. Abram cayó rostro en tierra, y Dios le habló así:

Stihovi vezani uz Génesis, 17:

Génesis 17 es un capítulo que describe a Dios haciendo una alianza con Abram, cambiando su nombre a Abraham e instituyendo la circuncisión como un signo de este pacto. El capítulo aborda temas como la obediencia a Dios, la importancia de la fe y la fidelidad de Dios para cumplir sus promesas. A continuación hay cinco versos relacionados con estos temas, en orden de proximidad al capítulo:

Romanos 4:3: "¿Por qué dicen las Escrituras?" Abraham creyó en Dios, y fue acreditado a él como justicia ". Este versículo destaca la importancia de la fe de Abraham en Dios, que fue acreditada a él como justicia, y se menciona en Génesis 17.

Hebreos 11:8: "Por Faith Abraham, cuando se lo llamó, obedeció y fue a un lugar que luego recibiría como herencia, aunque no sabía a dónde iba". Este versículo destaca la obediencia de Abraham para seguir a Dios, incluso sin saber a dónde iba, lo que se menciona en Génesis 17 cuando Dios le dice que "camine en mi presencia y sea justo".

Colosenses 2:11-12: "En él también estabas circuncidado, no con una circuncisión hecha por manos humanas, sino con la circuncisión hecha por Cristo, que es el movimiento del cuerpo de la carne. Esto sucedió cuando estabas enterrado con Él en el bautismo, y en él fueron criados a través de la fe en el poder de Dios que resucitó de entre los muertos ". Este versículo habla sobre la circuncisión espiritual que ocurre cuando una persona es bautizada y cree en Cristo, que es un cumplimiento espiritual de la circuncisión física mencionada en Génesis 17.

2 Timoteo 2:13: "Si somos infieles, él sigue siendo fiel, porque no puede negarnos a sí mismo". Este versículo destaca la fidelidad de Dios al cumplir sus promesas, incluso cuando las personas son infieles, lo que se evidencia en Génesis 17 cuando Dios promete a Abraham, que tendrá descenso y le dará la tierra de Canaán.

Gálatas 3:29: "Si eres de Cristo, eres el descenso de Abraham y herederos según la promesa". Este versículo destaca la importancia del descenso espiritual de Abraham, que se menciona en Génesis 17 cuando Dios promete a Abraham, quien será el padre de muchas naciones.