Job, 2

3. Yavé dijo a Satán: «¿Te has fijado en mi siervo Job? No hay nadie como él en la tierra; es un hombre bueno y honrado que teme a Dios y se aparta del mal. Aún sigue firme en su perfección y en vano me has incitado contra él para arruinarlo.»

Stihovi vezani uz Job, 2:

Job Capítulo 2 relata la continuación de la historia de sufrimiento de Job, donde es golpeado por una enfermedad dolorosa y debilitante. Aún así, sigue siendo fiel a Dios y se niega a maldecirlo. A continuación se presentan cinco versos de otros libros bíblicos que se relacionan con los temas cubiertos en el trabajo 2:

Salmo 41:3: "El Señor lo sostendrá en su cama de enfermedad, y la enfermedad lo restaurará". Este versículo habla sobre la atención de Dios con aquellos que están enfermos, lo cual es relevante para la situación de Job, que sufría de una enfermedad dolorosa.

2 Corintios 12:7: "Y para que no me enseñara con la grandeza de las revelaciones, me pusieron una espina en la carne, mensajero de Satanás, para abofetearme, para que no me exalte". Paul habla de una "espina en la carne" que se le da como un medio para mantenerlo humilde, y esto puede verse como similar al sufrimiento de Job.

Santiago 5:11: "He aquí, hemos bendecido los que han sufrido. Han escuchado cuál fue la paciencia de Job y viste el fin que el Señor le dio; porque el Señor está lleno de misericordia y compasión". Este versículo hace una referencia directa al Job y su paciencia en medio del sufrimiento, y muestra cómo los cristianos valoran esta calidad.

Proverbios 3:11-12: "Mi hijo, la corrección del Señor, ni se desanima, no se desanimará cuando, por él, es reprendido. Porque el Señor reprende a quien ama, como el Padre, al Hijo a quien Él quiere bien ". Este versículo habla sobre la corrección divina, que puede incluir sufrimiento y juicios. Esto es relevante para la historia de Job, que está siendo probada por Dios.

Romanos 8:28: "Sabemos que todas las cosas cooperan para el bien de los que aman a Dios, a los que son llamados de acuerdo con su propósito". Este versículo habla sobre cómo Dios puede incluso usar el sufrimiento por el bien de quienes lo aman y lo sirven. Esto es relevante para la situación de Job, que se está probando en su fidelidad a Dios.