pronađen 27 Rezultati za: Corriendo

  • Jacob hizo saber a Raquel que era hermano de su padre e hijo de Rebeca, y ella fue corriendo a decírselo a su padre. (Génesis 29, 12)

  • La mujer lo agarró de la ropa diciendo: «Vamos, acuéstate conmigo.» Pero él, dejándole su ropa en la mano, salió afuera corriendo. (Génesis 39, 12)

  • Allí se refugió Sísara, y llegó corriendo a la tienda de campaña de Yael, esposa de Heber, el quenita; pues había paz entre las tribus quenitas y los cananeos de Yabín, rey de Jasor. (Jueces 4, 17)

  • Fueron corriendo a sacarlo de allí y, una vez en medio del pueblo, vieron que sobresalía, de los hombros arriba, sobre todos los demás. (1 Samuel 10, 23)

  • pero a pesar de que la vieron corriendo en el suelo, nadie se atrevió a tomarla, ya que temían el juramento del rey. (1 Samuel 14, 26)

  • Ajimás, hijo de Sadoc, dijo: «Déjame ir corriendo a anunciar al rey la buena noticia de que Yavé lo ha librado de manos de sus enemigos.» (2 Samuel 18, 19)

  • Entonces Joab dijo a un cusita: «Anda a comunicarle al rey lo que has visto.» El cusita se arrodilló ante Joab y fue corriendo. (2 Samuel 18, 21)

  • David estaba sentado entre las dos puertas. El centinela que estaba apostado encima de la muralla vio que un hombre solo se acercaba corriendo. (2 Samuel 18, 24)

  • Mientras se acercaba este hombre, el centinela de la puerta vio a otro que llegaba corriendo y lo anunció al rey. David dijo: «También éste trae buenas noticias.» (2 Samuel 18, 26)

  • Sucedió que durante cerca de cuarenta días aparecieron en toda la ciudad, corriendo por los aires, jinetes vestidos de oro, tropas armadas y formadas en escuadrones, espadas desenvainadas, (2 Macabeos 5, 2)

  • No había muerto todavía, y encendido en valor, se levantó a pesar de la sangre que perdía por todas partes, y de sus otras heridas, y atravesó corriendo la tropa. Se detuvo sobre una roca abrupta (2 Macabeos 14, 45)

  • El que ama el placer terminará en la pobreza, nadie se enriquece corriendo tras el vino y los perfumes. (Proverbios 21, 17)


“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina