pronađen 105 Rezultati za: Impuro

  • Vale también para la persona que toca por inadvertencia cosas impuras, ya sea el cuerpo de una bestia impura, o de un animal impuro, o bien de algún reptil impuro, pero después se da cuenta y entonces se encuentra con un delito. (Levítico 5, 2)

  • Así serán capaces de distinguir entre lo santo y lo profano, entre lo impuro y lo puro, (Levítico 10, 10)

  • Pero no comerán el camello que rumia y no tiene dividida la pezuña, sino que será para ustedes impuro. (Levítico 11, 4)

  • El conejo que rumia, pero no tiene dividida la pezuña, será impuro para ustedes. (Levítico 11, 5)

  • El cerdo, que tiene la pezuña partida, hendida en dos uñas, pero no rumia, será impuro para ustedes. (Levítico 11, 7)

  • Cualquier otro insecto alado de cuatro patas será para ustedes impuro. (Levítico 11, 23)

  • Con solo tocar estos animales, ustedes contraerán impureza. El que toque su cadáver quedará impuro hasta la tarde. (Levítico 11, 24)

  • El que levante alguno de sus cadáveres tendrá que lavar sus vestidos y quedará impuro hasta la tarde. (Levítico 11, 25)

  • Ustedes tendrán por impuros a todos los animales que tienen pezuña no partida en dos uñas y no rumian; todo aquel que los toque quedará impuro. (Levítico 11, 26)

  • El que toque sus cadáveres quedará impuro hasta la tarde. El que levante el cadáver de uno de ellos tendrá que lavar sus vestidos, y quedará impuro hasta la tarde. Estos animales son impuros para ustedes. (Levítico 11, 28)

  • Ustedes tendrán por impuros a todos esos reptiles. El que toque sus cadáveres quedará impuro hasta la tarde. (Levítico 11, 31)

  • Quedará impuro cualquier objeto sobre el que caiga uno de sus cadáveres, ya sea un artefacto de madera, o un vestido, una piel, un saco o cualquier utensilio. Será metido en agua y quedará impuro hasta la tarde; después quedará puro. (Levítico 11, 32)


“O verdadeiro servo de Deus é aquele que usa a caridade para com seu próximo, que está decidido a fazer a vontade de Deus a todo custo, que vive em profunda humildade e simplicidade”. São Padre Pio de Pietrelcina