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  • Josué venció a todos estos reyes y se apoderó de todas estas tierras de una sola vez, porque Yavé peleó por Israel. (Josué 10, 42)

  • Desde la parte de la cordillera que sube hacia Seír, hasta Baal Gad en el valle del Líbano, a los pies del monte Hermón, derrotó a todos sus reyes, a quienes venció y dio muerte. (Josué 11, 17)

  • El espíritu de Yavé estuvo sobre él y se puso al frente de Israel. Hizo la guerra y Yavé puso en sus manos a Cusan Risataím, rey de Aram, al que venció. (Jueces 3, 10)

  • Hizo grandes hazañas, venció a los amalecitas y libró a Israel de los que lo saqueaban. (1 Samuel 14, 48)

  • David venció a los filisteos y los so metió, quitándoles el control del país. (2 Samuel 8, 1)

  • Venció también a los moabitas; les hacía ten der en tierra y los medía con un cordel: dos cor deles para los que estaban destinados a la muerte, y un cordel, a los que perdonaba la vida. Los moabitas quedaron sometidos a David y le pagaron contribuciones. (2 Samuel 8, 2)

  • Venció, asimismo, a Hadadezer, hijo de Re job, rey de Sobá, cuando éste salió a extender su poder hasta el río Eufrates. (2 Samuel 8, 3)

  • Cuando David venció a Edom, y Joab, jefe del ejército, subió a sepultar los muertos, mató a todos los varones de Edom, (1 Reyes 11, 15)

  • En aquellos días comenzó Yavé a recortar el país de Israel, y Jazael venció a los israelitas por todo su territorio, (2 Reyes 10, 32)

  • Entonces Joás, hijo de Joacaz, volvió a tomarle a Ben-Hadad las ciudades que Jazael le había tomado a Joacaz. Joás lo venció tres veces y recobró las ciudades de Israel. (2 Reyes 13, 25)

  • Venció también a los moabitas, que quedaron sometidos a David y le pagaban impuestos. (1 Crónicas 18, 2)

  • Declaró la guerra al rey de los amonitas, a los que venció. Los hijos de Amón le dieron aquel año cien talentos de plata, diez mil cargas de trigo y diez mil de cebada. Los amonitas le trajeron lo mismo el año segundo y el tercero. (2 Crónicas 27, 5)


“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina