pronađen 71 Rezultati za: Esclavo

  • el amo lo hará comparecer ante el Señor, lo acercará a la puerta de la casa o a la jamba y le perforará la oreja con un punzón; será su esclavo para siempre. (Exodo 21, 6)

  • Si uno mata a palos a su esclavo o a su esclava, será severamente castigado. (Exodo 21, 20)

  • Si uno salta de un golpe un ojo a su esclavo o a su esclava, le dará la libertad en compensación del ojo perdido. (Exodo 21, 26)

  • Si el buey acornea a un esclavo o a una esclava, el amo del buey pagará treinta monedas de plata al dueño del esclavo o de la esclava, y el buey será matado a pedradas. (Exodo 21, 32)

  • Si un hermano tuyo ha contraído una deuda contigo y se vende a ti, no le tratarás como esclavo; (Levítico 25, 39)

  • Porque son siervos míos que yo saqué de Egipto, y no deben ser vendidos como se vende un esclavo. (Levítico 25, 42)

  • Recuerda que fuiste esclavo en Egipto y que el Señor, tu Dios, te dio la libertad. Por eso te ordeno esto hoy. (Deuteronomio 15, 15)

  • Si tu esclavo te dice: No quiero salir de junto a ti, por razón de su amor hacia tu casa, y se encuentra contento contigo, (Deuteronomio 15, 16)

  • entonces, tomando un punzón, le harás un agujero en la oreja a la puerta y será esclavo tuyo para siempre. Si se trata de una esclava, harás lo mismo. (Deuteronomio 15, 17)

  • Acuérdate que fuiste esclavo en Egipto y pon en práctica cuidadosamente estos mandamientos. (Deuteronomio 16, 12)

  • Si un esclavo se escapa y se refugia en tu casa, no lo entregarás a su amo. (Deuteronomio 23, 16)

  • Si se descubre que alguien ha secuestrado a un hermano suyo israelita para emplearlo como esclavo o para venderlo, el secuestrador será condenado a muerte. Así extirparás la maldad de en medio de ti. (Deuteronomio 24, 7)


“É difícil tornar-se santo. Difícil, mas não impossível. A estrada da perfeição é longa, tão longa quanto a vida de cada um. O consolo é o repouso no decorrer do caminho. Mas, apenas restauradas as forças, é necessário levantar-se rapidamente e retomar a viagem!” São Padre Pio de Pietrelcina