Ezequiel, 19
10. Tu madre era como una parra plantada a orilla del agua, una parra fértil y verde porque no le faltaba el agua.
10. Tu madre era como una parra plantada a orilla del agua, una parra fértil y verde porque no le faltaba el agua.
“Enquanto estivermos vivos sempre seremos tentados. A vida é uma contínua luta. Se às vezes há uma trégua é para respirarmos um pouco.” São Padre Pio de Pietrelcina